Lo fue en mi juventud. Incluso objeto de algún que otro homenaje. Ya no me gustan las simplificaciones ni los simplificadores. Me apunto a lo opuesto, a la compleja sencillez.
Gracias, Crítico. Podría pasarme el día entero frente a la ventana. Sé que Matisse no es santo de su devoción, pero el francés pintó unas cuantas que me gustan. También Dufy. Tuvo ojo Bill Gates para apropiarse del nombre.
Vea la foto que encabeza mi blog, sin nieve (no hace falta nieve para la crudeza). La inhóspita Nueva York, más inhumana que Siberia.<br />
Su entrada de hoy es una hermosura: la imagen del herrerillo bebiendo. Que su patrón, San Pepe Carpintero, le conserve el lirio y la escuadra.