Un novelón iraní
Anoche vimos Le Passé, de Asghar Farhadi. Confieso que me gustan estos novelones iraníes. Los de Kariostami, antes, los de Farhadi, ahora. El Pasado es el primero que Farhadi filma en Francia, tras el triunfo que Cannes acordó a su filme anterior, Una separación.
El Pasado está tal vez un pelo o dos por detrás de Una separación. Le sobra una vuelta de rosca a la intriga, probablemente, y un cierto hieratismo se hace sentir en los personajes.
En los tres filmes de Farhadi que he visto hasta ahora (About Elli, Una Separación y este Pasado) un grupo de personas próximas entre ellas -una familia, un grupo de amigos- se ve confrontado a una drama que, para ser superado, les impone establecer una verdad común. La verdad, como sabemos desde Las Mil y una noches, no está en un solo relato sino en varios. Así, en los filmes de Farhadi, la verdad, como el horizonte, está al alcance de la mano, y cada vez que los personajes creen atraparla por la cola, alguien le pinta alas y se vuelve a alejar.
El Pasado transcurre en París, en un París tan periférico que acaba por parecerse a Teherán.