Canalblog
Suivre ce blog Administration + Créer mon blog
Publicité

Camino de Santiago

8 novembre 2007

El naufragio del Arca de Zoé

Tragicomedia franco-africana, con Sarkozy improvisando el rescate de unos improvisados rescatadores de niños.

Zo_

De las innumerables historias que cuenta la Biblia, una de las que ha conseguido fijarse con más fuerza en nuestra imaginación es la de Noé y su arca. Como se sabe, para castigar la maldad humana, Dios escogió al más puro de los hombres y le mandó construir un arca, embarcar a su familia y a una pareja de animales de toda especie para enfrentar el diluvio. De esta historia tomaron el nombre los miembros de la asociación francesa El Arca de Zoé para ilustrar su intención de salvar niños de la guerra de Darfur, cambiando Noé por Zoé, nombre femenino de connotación infantil muy común entre los franceses.

La de Darfur, región occidental de Sudán, es la guerra africana más reciente. La libra el poder central contra las poblaciones locales, principalmente por el control del agua, recurso escaso en esa sabana. Se calcula que a partir de 2003 cerca de medio millón de personas han muerto a consecuencias de este conflicto. El Arca de Zoé fue creada por ex miembros de otra asociación francesa llamada Bomberos sin Fronteras. Mediante una campaña de sensibilización en Francia, obtuvieron el apoyo de numerosas familias que se mostraron dispuestas a acoger y, eventualmente, a adoptar niños de Darfur y a financiar el traslado de éstos, por un monto promedio de 2 mil euros. A título de comparación obscena, se calcula en 6 mil euros el costo de una adopción de un niño del tercer mundo por una familia europea.

Operando desde el vecino Chad bajo el nombre de Child rescue (Rescate de niños), los miembros del Arca de Zoé, convenientemente vestidos de bomberos y utilizando los códigos propios de las organizaciones humanitarias, consiguieron beneficiarse de apoyos logísticos del Ejército francés para negociar con jefes locales de la región fronteriza entre Chad y Sudán la entrega de un centenar de niños. A fines de octubre, alquilaron un avión español e intentaron sacar a los niños hacia Francia, donde los esperaban las familias de acogida.

El caso es que no se trataba de niños de Darfur, sino de Chad, y no eran huérfanos ni estaban necesariamente enfermos. Eran, simplemente, los niños que tenían a mano. El Gobierno de Chad, que no es neutro en el conflicto de Darfur, esperó a que el avión estuviese a punto de despegar para detener a los seis miembros de la asociación, a la tripulación del avión español más un piloto belga, y a tres periodistas franceses que cubrían la operación. Para añadir espectacularidad al asunto, el presidente chadiano, Idriss Déby, los acusó a todos ellos de organizar el rapto de niños con fines pedófilos. Unos días después, la justicia chadiana decidió liberar a los periodistas franceses y a las azafatas españolas y, como la ocasión la pintan calva, el omnipresidente francés, Nicolas Sarkozy, abordó su avión y condujo personalmente a los liberados de regreso a Europa. Es probable que el resto de la tripulación española y el piloto belga sean liberados en los próximos días, pero los seis miembros del Arca de Zoé deberán, en principio, enfrentar un proceso judicial en Chad, donde pueden ser condenados a un máximo de 20 años de trabajos forzados. Sin embargo, también es probable que una vez que el proceso pierda espectacularidad, Francia negocie compensaciones económicas con el Gobierno de Chad, uno de los países más pobres del mundo, a cambio de su liberación anticipada.

No es ajeno a esta tragicomedia franco-africana el hecho de que el ministro de asuntos exteriores francés sea Bernard Kouchner, fundador del urgentismo y del deber de ingerencia como forma de cooperación, lo que probablemente dio alas a los de Zoé. Con todo, Kouchner, socialista renegado, sale desperfilado de esta aventura franco-africana, tanto como el propio ejército francés, que recibió en octubre un mandato europeo para desplegarse en la frontera sur occidental de Sudán como manera de contener el conflicto. Sarkozy, que acaba de subirse el sueldo en 170%, ha utilizado por su parte este naufragio humanitario para ganar adeptos, según su costumbre, a punta de teletones y de espectáculo para las cámaras. Y, a pesar de que el juicio abrupto del presidente chadiano sea impresentable, es verdad que algo hay de pedofilia -sin contenido sexual, por cierto- en la extendida actitud europea de dar por buena la acogida de niños y rechazar con un portazo en las narices a los inmigrantes adultos.

logocl 8 de noviembre de 2007 PDF

Publicité
Publicité
4 novembre 2007

Dos días en Amsterdam

Las noticias son amenazadoras y los lectores somos impresionables. Por fortuna, Sarkozy endereza cualquier entuerto con su tarjeta Visa.

Dos días caminando por Amsterdam, intentando no prestar atención a las noticias. A la entrada de la ciudad, impresiona el baile de las autopistas con los edificios metálicos, paleto que es uno. En la ciudad, por las calles que bordean y cruzan los canales, asombra el ballet incesante de las bicicletas.

Dos días caminando con zapatos nuevos. Aprietan los viejos pies dentro de los zapatos nuevos. A los viejos zapatos se les había abierto una vía de agua. Cuando yo era niño y mi padre vendía zapatos en la Zapatería La Reina, podía pagársele a alguien para que amansara los zapatos recién comprados.

Tres paradas en la caminata por Amsterdam: la Iglesia nueva, la Sinagoga portuguesa, el Mercado de las flores.

Los protestantes eran gente iconoclasta y la emprendieron contra las imágenes que a los católicos les había llevado siglos imaginar, confeccionar y venerar. Abajo con ellas. La última flecha, la definitiva,  para San Sebastián. Muerte para  cada una de las once mil vírgenes que acompañaron a Santa Úrsula. La Iglesia nueva (Nieuwe Kerk) fue católica hasta que la reforma protestante se la apropió. Ahora es lugar de exposiciones. Las imágenes están de vuelta. La exposición presente se llama Held (héroe).

La Sinagoga portuguesa fue edificada por los sefardíes, huidos de la península ibérica, en el XVII. Su interior es tan descarnado como el de una iglesia protestante. Tal vez la reforma protestante haya sido una fuga adelante de regreso  al judaísmo, a la abstracción y al préstamo con intereses. Lo más próximo a una imagen en la sinagoga son los caracteres y los candelabros. Dios es invisible y su nombre impronunciable. Como el dinero, es inodoro, incoloro e insípido.

Vondel_Park_Amsterdam

El Mercado de las flores permite el reencuentro con las formas, los colores, los olores. Como lo permitirían las imágenes del Rijksmuseum o del Museo Van Gogh, de no ser por esas filas tan largas que se forman a la entrada. Los colores del otoño quedan reflejados en el agua de los canales, en las plantas que trepan por los ladrillos de las casas, en los jardines entrevistos detras de las ventanas, como el Vondel Park se entrevé por los resquicios de las calles.

El Hortus Botanicus queda a la espera. I amsterdam, dice la chaperona.

1 novembre 2007

El rock se ha vuelto reaccionario

Frank Zappa, parodiando a las estrellas del rock: Estamos en esto sólo por el dinero.

SC

Ha nacido el primer ser viviente en el espacio y ha sido bautizado con el nombre de Esperanza. Ha visto la luz durante el vuelo del satélite europeo Foton y se trata de una cucaracha. Dos páginas más adelante, el diario informa que bajo las frías aguas de las costas islandesas los científicos se han topado con el ser vivo más viejo del planeta, una almeja que ha vivido más de 400 años. Se creía que tras una explosión nuclear los bichos que sobrevivirían serían las cucarachas. Tal vez se les sumen ahora las almejas. Se creía también que el hombre conquistaría los espacios siderales para su mayor gloria y nombradía. Por lo pronto, está exportando cucarachas. Un diario no deja de ser una bola de cristal y una caja de sorpresas.

El mismo diario explica que el baterista de The Police, un tal Stewart Copeland, ha soltado un exabrupto a propósito de las presidentas de Chile y de Argentina y de la senadora norteamericana Hillary Clinton, frente a las cuales ha dicho necesitar, para aproximárseles, un grado creciente de intoxicación alcohólica. Es sorprendente que se siga tendiendo el micrófono a cualquier aporreador de tambores suponiendo que sus resoplos son opiniones dignas de ser reproducidas.

Las revistas de la primera época del rock argentino comprendieron rápidamente que la mayoría de los llamados rockeros eran afásicos o iban camino de serlo, de manera que acuñaron para ellos una pregunta tipo: "Habláme de la relación de vos con tu guitarra". Frank Zappa, que conocía al personal de cerca, llamó a uno de sus discos, paródicamente, "Estamos en esto sólo por el dinero". Si ya era el caso cuando grabó ese disco, en 1968, cuánto no lo será 40 años más tarde, tratándose de estrellas recauchadas que se detestan entre ellas y sólo se arrejuntan para aumentar lo que tienen con lo que les toca.

El propio Sting, cantante y bajista de The Police, afirmó años atrás que el rock se había vuelto reaccionario. Ahora alterna las giras multitudinarias con la grabación, acompañado únicamente por un laúd, de unas magníficas canciones de John Dowland, un compositor inglés del siglo XVI. Es difícil imaginarse a un tañedor de laúdes soltando inconveniencias. El medio es el mensaje. El asunto es que para llenar estadios y comprar propiedades, Sting no sólo tiene que hacer plañir el laúd sino que dejarse sacudir la batería. Que el mamporrero baterista sea hijo de un agente de la CIA es un dato que, a su edad, debería ser secundario, pero él se encarga de actualizarlo en cuanto abre la boca.

Tampoco las lumbreras de la ciencia tienen necesariamente algo sensato que decir cuando se les tiende un micrófono. El descubridor del espiral del ADN y Premio Nobel de Medicina, el norteamericano James Watson, se despachó hace unos días con estas declaraciones: "Todas nuestras políticas de cooperación con África se fundan en el hecho que el nivel de inteligencia de los africanos es el mismo que el nuestro. Quien haya tenido un empleado negro sabe que no es así". Los diarios modernos traen los comentarios de los lectores incorporados: "Por lo visto, la inteligencia no impide la estupidez". Como con los rockeros, con ciertos premios Nobel habría que limitarse a la pregunta tipo: "Habláme de la relación de vos con tu ADN". El problema con los maleducados es que dejan flotando una sensación desagradable ahí por donde pasan. Y lo que dicen tiende a contaminar todo lo que sigue.

A propósito de la elección de Cristina Fernández a la Presidencia argentina, cabe preguntarse si la manía dinástica del peronismo, el antojo por los cónyuges de sus próceres, no será un rotundo atavismo. Pero tal vez sea darle demasiada importancia a un detalle que no lo tiene. Este mismo lunes, unas horas apenas después de ganar Fernández la elección presidencial argentina por amplio margen, la noticia de su victoria ya no era portada en los diarios bonaerenses en internet. Es verdad que su triunfo era previsible, que el nuevo Gobierno representa la continuidad y que la inmediatez de la red exige la renovación constante de los titulares.

Al lector se le ocurren un par de chistes sobre la almeja, la cucaracha, las bolas de cristal y los rockeros. Pero se los guarda. Contrariamente a lo que nos venden a diario, la discreción es más lúcida y más lucida que la mala educación.

logocl 1° de noviembre de 2007 PDF

29 octobre 2007

El lugar sin límites

Donoso"Ahora está de moda algo que se denomina periodismo participativo, donde cualquier persona (o sea, las audiencias) puede escribir su crónica o su opinóloga columna. Se trata de un fenómeno no muy distinto de los diarios murales, sólo que optimizado por la tecnología, algo que alegra a los expertos, que tratan de elevar la categoría del asunto con marcos conceptuales y disquisiciones sociológicas, o sea pamplinas, un poco más de ruido a la bulla", escribe Roberto Merino en su columna de ayer domingo 27 en el diario chileno Las Últimas Noticias.

Por mi parte, no tengo nada en contra de los diarios murales. Al contrario, soy incapaz de pasar delante de uno sin leerlo. Tengo incluso que retenerme para no recoger cualquier papel escrito que se arrastra por el suelo. Suelo leer el periódico de la comuna donde vivo, me hace falta la vida de la gente siempre que esté por escrito, me viene bien saludarla y despedirla en la lista de nacimientos y en la de defunciones. La prensa es, entre otras cosas, un espacio de sociabilidad, muy útil para animales sociales e indispensable para agorafóbicos, misántropos y otras bestias peludas.

Hace unos días Jorge Bravo me envió la reseña de una novela de José Donoso, El lugar sin límites, que publicó en el diario local de Temuco en internet, La Opiñón. Le celebré la gracia, el nombre del diario, le pregunté cómo se sostiene una experiencia como ésa. Me habla de Atina Chile y del apoyo financiero de una multinacional de las telecomunicaciones, que sostiene una red de diarios locales en las ciudades chilenas, uno de los cuales El Morrocotudo, en Arica, está bastante consolidado, con 15 mil visitas diarias.

El nombre del libro, El lugar sin límites, se refiere al espacio de la hacienda rural, ilimitado antes de la reforma agraria. Y viene como anillo al dedo a este respecto. Internet es precisamente eso, un lugar aparentemente sin límites constituido por espacios tan delimitados como pueden ser los que traza un diario local.

Internet, ¿el lugar sin límites? Según y cómo y dónde.

PS: Entretengo la espera de la última entrega de la trilogía 'Tu rostro mañana', de Javier Marías, 'Veneno, sombra y adiós', escuchando a Marías presentarla en el nuevo sitio CeldaTV, que se ha inaugurado en Madrid y cuyo enlace me envía Adolfo. Marcelo Maturana está en Calaceite presentando unas líneas sobre José Donoso. También las espero para copiarlas aquí.

25 octobre 2007

Arde San Diego

El rojo del agua de la Fontana di Trevi, en Roma, evoca la sangre y el fuego. 

Trevi

Quien no tiene petróleo tiene que tener ideas, se le oye decir a un ecologista suizo, mientras celebra los buenos resultados del partido verde en las elecciones de su país. Elecciones que ha ganado, por lo demás, la derecha xenófoba,  pero como Suiza es un país muy suizo, tras las elecciones los partidos se distribuyen los ministerios en función de los resultados y gobernarán conservadores, liberales, socialistas y ecologistas, todos juntos, tal como pedían Los Jaivas.

Lo que indicaba el portavoz verde suizo es que su partido con pocos medios había conseguido buenos resultados. Es verdad que la relación entre medios y resultados es la que permite evaluar. Esta semana se ha publicado un estudio que muestra la correlación entre el gasto electoral y los votos obtenidos en las últimas elecciones en Bélgica. Sin sorpresa, el voto ecologista es el mejor evaluado: cada voto le costó a los verdes 80 céntimos de euro, mientras que al resto de los partidos les supuso unas tres veces más. En Chile, ¿es más caro el voto aliancista, el concertacionista o el extraparlamentario? ¿Cuánto le cuesta a la UDI cada voto? La derecha se autoproclama liberal, pero suele no serlo allí donde el mercado se le resiste. En Norteamérica, el cálculo es ocioso: nadie que no sea millonario puede pretender convertirse en representante popular.

Parece claro que al precio que está el barril de petróleo, que bordea ya los cien dólares, a falta de tener pozos y refinerías más vale tener ideas. Sólo quienes tienen petróleo, como Bush, como Chávez, como el rey Abdalá, pueden permitirse el lujo de tener vacío el depósito de ideas. La idea de Bush para hacer frente al encarecimiento del petróleo y a la extrema dependencia de su país al oro negro ha sido invadir Irak y producir combustible a partir de las plantas. Y esta idea, en apariencia inocente, está cambiando el mapa de Sudamérica, subiendo el valor del suelo y el de los cereales y convirtiendo en humo lo que queda de bosque nativo y de selva amazónica. Chávez por su parte, también tuvo una idea que consistió en adelantar los relojes en media hora.

África produce ya más de 10% del petróleo mundial y recibe a cambio abundante corrupción y contaminación y, de yapa, alguna que otra guerra, la última de las cuales ocurre en Darfur, al sur de Sudán. Nigeria, por ejemplo, el primer productor africano, extrae petróleo desde hace medio siglo y, sin embargo, debe seguir comprando todo el combustible que consume, a falta de una única refinería sobre su territorio. Mientras tanto, la inmensa mayoría de la población nigeriana malvive aún con menos de un dólar al día.

El resto de la humanidad, a falta de petróleo, no tiene más que correr detrás de alguna idea brillante, tal como convertir la energía que generan los pasos de los peatones en alumbrado público, aprender inglés o suahili por osmosis o poner a las moscas a producir miel. Los miembros de un grupo italiano, Azione futurista, también tuvieron hace unos días una idea colorida y mezclaron tinta roja con el agua de la Fontana di Trevi, en Roma. La idea no era gran cosa, pero el color rojo es vistoso, porque evoca la sangre y el fuego, el pecho de la loica y el capote del torero, y atrae a turistas y mirones del mundo entero. Armados de un puñado de anilina, estos romanos seudo futuristas y buenos publicistas consiguieron estar en todas las portadas y en todas las pantallas, no sólo en la crónica roja, al lado de la sangre que se vierte por estos días en Pakistán y en Irak y de los incendios que abrasan ahora mismo la región de San Diego, en California. En la frontera entre EEUU y México se han reunido una vez más las condiciones para la proliferación del calamitoso fuego: viento, altas temperaturas y ausencia de lluvia.

Bush debería tener cuanto antes una buena idea y ratificar el Protocolo de Kioto, que busca reducir las emisiones de gases producidos por la quema de combustibles fósiles, carbón, gas y petróleo, que están atosigando la Tierra. Le quedan pocos meses antes de que lo desaloje de la Casa Blanca y firme ese tratado en su lugar una señora rubia o un señor moreno.

logocl 25 de octubre de 2007 PDF

Publicité
Publicité
18 octobre 2007

Vida interior

Vida privada es aquello que no interesa a nadie más que a uno mismo. Y a veces ni siquiera.

ID899689_17_sarko02_afp_00DDF0_0

En la antológica obra de teatro Tres noches de un sábado, durante la noche intermedia, la de clase media, una de las muchachas le preguntaba a un galán, mientras bailaban: « ¿Tú tienes vida interior? ». Esa era la pregunta fundamental de la época porque acceder a una vida interior, a fines de los años sesenta, era más importante aun que alcanzar el DFL2 o el Fiat 600. Tener vida interior era la condición del éxito y de la movilidad social.

Hoy la movilidad social se ha producido al menos en esa materia y la vida interior prolifera. Tan común ha llegado a ser tener vida interior que ya nadie se la guarda para si mismo. Para qué, si todos tienen. Para qué, si hay de sobra. Hay que sacarla a pasear y exhibirla, como salen los brazos a relucir bajo el sol de la primavera. Hay que contarlo todo por teléfono, por MSN, en el diario, en el blog, en la tele de preferencia, al que se ponga a tiro, a la vecina, al Rumpy, a la galería imaginaria (como la llamó don Gerardo de Pompier). Esta desenvoltura colectiva acarrea una perfecta paradoja: buscando la sinceridad hablamos y hablamos, lo que nos lleva derechamente a la impostura.

Así se ha ido acuñando la noción de extimidad (derivada de intimidad) para explicar este reflejo del ser que envía hoy a un exterior virtual, más o menos automáticamente, el rumor de su interioridad. Rumor que amplifican y deforman los medios, muchos de los cuales no son ya mucho más que vida privada ventilada, intimidad exhibida, extimidad. Unos medios que no hacen públicos más primores privados no porque no quieran sino porque no pueden. Arcadi Espada ha hecho a este propósito una precisión: « Vida privada es la que no puede contarse. La que no puede, no la que no se debe. Vida privada no es un término moral ni jurídico. Es técnico ». Es decir, vida privada es aquella que queda sin publicitar, no porque no se deba sino sólo porque no hay manera, o no interesa. Se podría añadir que vida privada ya es aquello que no interesa a nadie más que a uno mismo. Y a veces ni siquiera.

Como quiera que sea, la moderna expresión de la extimidad suele girar en torno a una vieja rueda, la búsqueda de la pareja, de la otra mitad. Y el resultado deja que desear. Porque lo que a menudo se encuentra tiene menos de la perla al fondo de la ostra y mucho del chicle pegado debajo de la mesa. Como en esta perla que cuenta el semanario serbio Zabavnik: Un hombre y una mujer entablaron contacto por internet y se enamoraron tras intercambiar unos cuantos mensajes electrónicos. Él la llamaba Azúcar y ella Príncipe de la satisfacción. Cuando la relación se volvió lo suficientemente seria, decidieron verse. La vida te da sorpresas, como es bien sabido, y el encuentro acabó con la ilusión, ya que la dulce Azúcar y su Príncipe resultaron ser en la vida real marido y mujer. Los mismos que se detestaban en la realidad, se ilusionaron el uno al otro frente la pantalla del computador. Por cierto, no bien se recuperaron de la sorpresa, decidieron divorciarse, alegando el engaño matrimonial como motivo.

Como esta historia transcurre en internet, no falta quien diga que se trata de un hoax, que es la manera moderna de designar a los embustes. Pero, como decía el italiano, se non é vero, é ben trovato. Y tiene su punto optimista, lo que siempre es de agradecer.  Ahora que por primera vez se hace público el divorcio de un Presidente de la República francesa en ejercicio, la historia de Azúcar y del Príncipe de la satisfacción le podría traer a la magna pareja rota la esperanza de una nueva oportunidad. Quién sabe si un día, a través de internet, ella le pregunte a él, nuevamente ilusionada: « ¿Tú tienes vida interior? ».

logocl 18 de octubre de 2007 PDF

PS: La paradoja del sincero impostado está tomada de L'Absence de l'intimité, de Henri-Pierre Jeudy.

12 octobre 2007

Estampas del territorio de la tribu

Adolfo Estrella

Extrañamiento y entrañamiento

En el siglo diecinueve dos visitantes extranjeros, Rugendas y Graham, describieron la sociedad chilena en los primeros años de su vida independiente. Rugendas, pintor, permaneció once años en el país y dibujó con trazo romántico escenas de la vida urbana y rural de las clases sociales de la época. Graham, escritora, se queda en el país un poco menos tiempo pero lo estudia y lo describe con detalle después de ver morir a su marido, un oficial británico, en la travesía por el Cabo de Hornos. Dicen que para evitar que se descompusiera el cadáver del marino, lo llevaron a Santiago dentro un barril de ron: técnica de conservación tan poco fina como eficaz.

Rugendas y Graham expresan la mirada del extranjero sobre un espacio exótico sobre el cual sabían poco y querían menos. Para los que nacimos, pero que voluntariamente hemos optado por no vivir allí, sin embargo, mirar, describir y analizar a Chile, es bastante más complejo. El país en el cual nacimos y crecimos es, al mismo tiempo, propio y ajeno, cercano y lejano,  “entraño” y extraño. Cada viaje es, a la vez,  un regreso a la patria y una primera incursión solitaria en territorio comanche. Por eso, a veces salimos de allí gorditos y colmados de cariño y otras veces traemos el alma y el cuerpo llenos de heridas. Por mi parte, esta vez, he vuelto afónico...

El país nos importa, imposible negarlo pero, simultáneamente, no podemos dejar de comportarnos como naturalistas observando bichitos o como antropólogos participando en los rituales de una tribu a la que conocemos, porque es nuestra tribu, pero a la cual observamos con la distancia emocional que nos concede la lejanía intencionalmente mantenida a través de los años. La tribu salta, canta, se pintarrajea la cara y nos invita a la danza común pero declinamos la invitación y preferimos mantenernos a la orilla del ruedo.

Hay un deber de pertenencia que directa o indirectamente se nos exige cumplir a los que dejamos el país. “Tú eres chileno” se nos espeta. Y uno responde que sí, que obviamente, pero sintiendo, a la vez, que no lo es en absoluto, y que, incluso, no sabe si quiere serlo, como tampoco sabe si quiere ser español, boliviano, belga, chino o lapón, porque rechaza la categoría nacional como un criterio de identidad relevante. En realidad, no tiene idea qué es lo que significa ser chileno. Pero nuestro interlocutor no nos hace caso y defiende una pertenencia eterna que nos ataría de por vida a esa tierra y a esa cultura y que no podríamos desatar sin incurrir en traición o deslealtad. Uno, inútilmente, trata de mostrar que es posible buscar identidades electivas o adquiridas y desconfiar de aquellas adscritas, innatas o pretendidamente naturales. Nuestro interlocutor sencillamente no nos escucha. Por nuestra parte, tampoco realizamos más esfuerzos por hacernos entender. Entonces, pergeñamos estas estampas, después de nuestro reciente viaje al territorio de la tribu sin estar muy seguro de nuestro derecho a realizarlas.

1846_ValpoRugendas1

Nacionalismo

El surrealista Matta les proponía a los chilenos que vendieran el país y se compraran un terrenito cerca de París (otros afirman que era una propuesta del poeta Molina). La idea, aunque cara en su ejecución, no es mala pero, por supuesto, no es bienvenida en una sociedad con un nacionalismo en alza. Nacionalismo de camiseta tricolor y gritos de “Viva Chile” a la primera oportunidad. Nacionalismo transideológico, orgulloso de los “éxitos” del país. Nacionalismo iracundo, gritón, grosero y feo como todos cuando se junta la manada. El nacionalismo chileno, enfermedad infantil del desarrollismo salvaje, no es peor que otros, ni mejor, pero a este cronista se le antoja “rasca”, con estética de barra brava e ideología de primer curso de escuela militar.

Como todos los nacionalismos nace más de las frustraciones que de los éxitos colectivos. Como todos, expresa más la inseguridad del débil que la certidumbre del fuerte. La soberbia es su máscara. En la actualidad, es más social que político, más folklórico que programático. Pero, vaya uno a saber si, cuando lleguen las vacas flacas, no aparecerá el caudillo de pacotilla que se ofrezca redimir a las masas invitándolas a un camino de gloria.

Pobres

“Los pobres están poblando el paraíso”, dijo alguna vez el poeta Zurita. Y es rigurosamente cierto. La dinámica de los percentiles, objeto sagrado de la religión de los economistas, muestra una disminución de la miseria. Pero eso significa que los miserables dejan de serlo y pasan a ser pobres; nadie transita desde un campamento o una población marginal a La Dehesa, salvo para ir a limpiar casas. Por lo tanto, hay más pobres. Eso sí, pobres con tarjeta de crédito de Almacenes París, es decir, pobres en el paraíso. Pobres que creen que han dejado de serlo cuando pagan el televisor de treinta pulgadas en cuotas infinitas. Aleluya: el paraíso sobre la tierra chilena ha llegado. Dios existe, Zurita es su profeta y los bancos son su Iglesia.

Deudas y créditos

Chile es una gran deuda. La externa, la que se tenía con los acreedores extranjeros se ha ido pagando a costa de los sacrificios de los de siempre. El pago de las deudas internas, las financieras y las morales, continua diferido. Las deudas financieras individuales más bien crecen y crecen. El capitalismo periférico chileno, subordinado y sumiso se sostiene, entre otras cosas, por el endeudamiento generalizado de la población: puede usted pagar a plazos desde la compra diaria del supermercado, pasando por unas zapatillas deportivas, hasta una casa. Todo es comprable porque todo es financiable: sólo hace falta tener el tiempo vital para pagar las deudas: muérase usted cuando le corresponda, ni antes ni después, el sistema se lo agradecerá.

Las deudas morales, las que el país tiene con sus pobres, sus desaparecidos, sus torturados, se pagan en pequeñas cuotas y a largo plazo. No están en la agenda de casi nadie porque lo importante es no “hacer olitas”, no poner en peligro lo conseguido, aceptar que todo se hará “en la medida de lo posible”. La ética del posibilismo carcome los liderazgos y entristece los sueños comunes.

Autopista

Autopistas

En Chile las autopistas son estupendas y los chilenos se enorgullecen de ellas, como se enorgullecen de los centros comerciales y de los barrios de los ricos en los que nunca vivirán pero que consideran como propios. Eso sí, en las privadísimas autopistas nacionales, hay que pagar múltiples peajes para seguir la senda del desarrollo. Las autopistas son excelentes metáforas del país. Las autopistas de Chile, rectas, ordenadas, bien señalizadas nos advierten de los peligros y cuidan a los automovilistas. Pueden ser, sin embargo, trampas mortales para los miserables (todavía quedan algunos) y pobres (hay muchos) que viven a su vera y tratan de cruzarlas. Los diseñadores de las autopistas han dispuesto pasarelas cada cierta cantidad de kilómetros para que éstos transiten, ordenadamente, de un lado a otro. Pero algunos testarudos o incivilizados que, mire que mala pata, tienen su trabajo o sus familiares al otro lado de la vía, no lo hacen y se lanzan a cruzarlas. Algunos mueren en el intento. ¿Qué haría usted si le pusieran una barrera entre su casa y el colegio de los niños o entre su casa y el trabajo?  Pero no se preocupe, si usted no es pobre o miserable eso nunca le sucederá.  Eso sí, le podrán plantar un edificio de quince pisos junto a su casa de manera que cuando salga a colgar los calzoncillos recién lavados los vecinos del piso ocho lo comentarán mientras comen.

Farmacias

Por todas partes farmacias y más farmacias. Por doquier emergen estos bazares de la abundancia consumista. Las esquinas son su hábitat preferido. Ofrecen desde chocolates hasta “fierritos para anticuchos”; desde mantas térmicas y pañales hasta analgésicos y ansiolíticos. Sin legislación que limite el giro de su negocio, las farmacias chilenas, propiedad de grandes cadenas comerciales, cubren todo el espectro del consumo y se integran perfectamente en sus espacios. Dentro de los supermercados son su complemento perfecto. La sociedad chilena consume pastillas con voracidad. El engranaje funciona a la perfección: el sistema seduce con sus objetos, la imposibilidad de acceder a ellos o el alto coste que implica hacerlo genera frustración y ansiedad. Pero allí están los analgésicos, para los males del cuerpo y los ansióliticos para los males del alma, inmediatamente a la salida, después de pasar por caja.

Transantiago

Ingenieros, políticos, consultores y funcionarios consiguieron convertir algo pésimo en algo aún peor. Esto tiene su mérito, no podemos negarlo. Lo que pudo ser una gran acción civilizadora para una ciudad con un transporte público salvaje acabó convertido en un desastre histórico de grandes proporciones, suma de despropósitos, errores de bulto, irresponsabilidades e ineficiencias sin límite. Todos ellos impunes, por supuesto. Pocas veces una política social ha sido tan desastrosa que sus beneficiarios han acabado añorando la situación anterior. Pocas veces la acción del Estado ha quedado desprestigiada de manera tan absoluta y brutal.

Santiago

Amigos

Uno tiene amigos para que lo quieran: de lo contrario, bastaría con tener confidentes,  psicoterapeutas, asesores personales o jefes. Los amigos dignifican al país y a la especie humana y justifican viajar cada cierto tiempo y aguantar, más o menos estoicamente, trece horas de avión inmovilizado en unos asientos a escala liliputiense.

Los amigos nos reciben con amor y soportan la distancia,  la ironía y el cinismo con la que tratamos las cuestiones patrias. Nos quieren a pesar de nuestra ingratitud, displicencia o frialdad que mostramos hacia el país en el que ellos viven y, a su manera, aman. Por eso, la patria es al final cuestión de libros, recuerdos y amigos.

11 octobre 2007

Misiles y besitos

t_20071008_00D8JZ_0
Jóvenes palestinos huyen de un misil. La foto es de Mahmud Hams.

Un fotógrafo yace herido de bala en el suelo de una calle de Rangún, la capital birmana, mientras los militares disparan y los manifestantes escapan. El moribundo es un fotógrafo japonés de nombre Nagai Kenji. Otro fotógrafo estaba cerca e hizo la foto. Puesto así parece una perogrullada, pero no siempre hay un fotógrafo cerca, o bien no siempre la imagen resultante llega a ser publicada. No había, por cierto, una cámara cerca cuando, hace exactamente un año, mataron en Moscú a la periodista Anna Politovskaya, quien más claro había puesto por escrito los atropellos rusos en Chechenia, ese pequeño rincón del infierno, como lo llama en su libro de crónicas.

La dictadura birmana intenta hacer desaparecer a los testigos de sus crímenes. Y, peor aún, se vale de las fotos captadas por los propios fotógrafos perseguidos para  identificar y arrestar a los que se manifiestan contra ella. Frente a tanto atropello, la comunidad internacional, esa entelequia, deja en las manos de China y de Rusia el empeño por la democratización de Birmania. Como quien dice, deja gallinero al cuidado del zorro. ¿Qué democracia van a exigir a los esclavistas militares birmanos los gobernantes chinos que masacraron a su vez a sus opositores en la plaza Tian’anmen?

No hacía otra cosa hace apenas veinte años la dictadura chilena. Enrique Lihn escribió en su día en una revista desprovista de fotos sobre ese reflejo dictatorial de prohibir la circulación de las imágenes. Qué extravagantes pueden parecer hoy esas revistas vaciadas de imágenes manu militari. La democratización de la fotografía digital multiplica ahora las imágenes disponibles. Los fotógrafos ya no disparan, ametrallan. La abundancia, eso sí, no siempre significa diversidad. Nada se parece tanto a un álbum colgado en internet como otro álbum colgado en internet.

Pero la sobreabundancia de fotos no ha vuelto irrelevante al periodismo gráfico. Basta echar una mirada a las fotos premiadas recientemente por el Premio Bayeux 2007 a los corresponsales de guerra para convencerse de lo contrario. La foto premiada muestra a un grupo de muchachos palestinos desarmados corriendo a protegerse no ya de las balas del ejército israelí sino derechamente de un misil. El año pasado la foto premiada mostraba a una anciana palestina aferrada a sus olivos destruidos. La mayoría de las fotos recompensadas este año fueron tomadas en el mundo musulmán, donde se dan hoy por hoy los conflictos más cruentos, en Irak, Afganistán, Palestina, Líbano, Sudán. Obligadas a convivir con la muerte, las sociedades islámicas asumen, tan bien que mal, su correlato, la representación de la muerte. Por contra, al otro lado de la línea, la sociedad norteamericana, supuestamente más abierta a la circulación de la información, está  imposibilitada de hacer algo tan llano como mostrar las imágenes de sus soldados muertos.

En otra esfera, menos dramática, los scoops fotográficos suelen provocar sonrisas del público y muecas en sus protagonistas. Hace unas semanas un político belga, Jean-Luc Dehaene, hábil negociador, llegaba a una reunión en la cumbre con una nota confidencial. Un fotografo captó y amplió la imagen y el público pudo así conocer el contenido de la nota reservada al mismo tiempo que sus destinatarios. En Francia, a la salida del útimo consejo de ministros, Nicolas Sarkozy se acercó a saludar a la prensa con una carpeta en la mano. Un fotógrafo amplió la imagen y descifró la nota que llevaba Sarkozy. Se trataba de un billet doux femenino: No sabes cuánto te extraño, millones de besitos, etcétera. Que el presidente francés reciba mensajes como ése no tiene nada de particular, desde luego. Lo gracioso es que los lea durante el consejo de ministros.

Bien sea por estas u otras razones, el penúltimo diario del mundo que no mostraba fotos en su portada, el muy austero Frankfurter Allgemeine Zeitung (un millón de fieles lectores), abre sus páginas desde comienzos de esta semana a la fotografía. No se trata todavía de monas piluchas (Affen ohne Kleider), pero es de suponer que éstas no tardarán.

logocl 11 de octubre de 2007 PDF

5 octobre 2007

Viernes

La familia Pinochet en pleno en la cárcel, tal como la antigua y la nueva directiva de Batasuna. Uno para todos y todos para una. No está mal, para ser día viernes. Conviene creer en la justicia pero, por lo pronto, no estaría de más ir cambiando el nombre de esta sección y llamarla Pozo escéptico

Pinochet

__________________

El diario El País informa que L. Mahadevan, de la Universidad de Harvard, y Enrique Cerda, de la Universidad de Santiago, en Chile, fueron reconocidos por la revista Annals of Improbable Research con el premio Anti Nobel de física por su estudio sobre cómo se arrugan las sábanas.

___________________

Juan José Millás comienza su columna en el mismo diario escribiendo que El pueblo vasco, como el español o el belga, por poner tres ejemplos, existen porque la vida es absurda. La frase es resultona pero imprecisa. Como previene el tango, la vida no sólo es absurda, la vida es una herida absurda.

___________________

Todo lo cual recuerda que hoy es viernes, día que nos mueve a la humildad.

Cat_lica

4 octobre 2007

Tintín en el Maletín

Los niños se encargarán de leer los libros buenos y de dar buen uso a los libros malos.

Tint_n

Que los niños puedan leer es lo mejor que les puede ocurrir. O que alguien les lea, mientras no saben, mientras están aprendiendo. De todas las iniciativas habidas y por haber, poner un maletín con libros al alcance de los niños que no tienen libros parece la más sensata. Poner una biblioteca en cada casa es como poner en cada escuela una conexión a Internet con banda ancha. Casi no teníamos libros en casa, canta Caetano Veloso, y la ciudad no tenía librería, pero los libros que entraron en nuestra vida son como la radiación de un cuerpo negro expandiendo el Universo. Los libros son objetos trascendentes.

Ahora bien, según y cuáles. Libros y amigos, pocos y buenos, dice el refrán, sin detallar la cantidad. En el caso de la iniciativa del Maletín literario, se trata de 49 libros que serán distribuidos a 133 mil niños de escasos recursos a lo largo de Chile, a partir del próximo año y hasta 2010. Un jurado de trece miembros los ha seleccionado y ha presentado esta semana la lista resultante.

Tantas cifras mueven a hacer cálculos. Cuántas páginas representan esos 49 libros, cuánto se tardaría un niño en leerlas. De los 49 libros seleccionados, cuántos has leídos. Cuáles te han gustado. Cuáles te llevarías a la famosa isla desierta. Cuáles les regalarías a los sobrinos, a los hijos de los amigos, a los amigos de los hijos, si los libros tuvieran un precio razonable, el precio que tuvieron un día los libros que publicaba Quimantú.

Hay una iniciativa paralela a ésta del Maletín de los 49 libros, que consiste en dotar a los niños pobres de computadores portátiles resistentes y baratos. Computadores que les costarán a los gobiernos interesados por la iniciativa, entre los cuales se cuentan Brasil, China e India, alrededor de cien dólares cada uno. El costo de repartir los 49 libros a 130 mil niños representará el equivalente del precio de casi 50 mil de esos computadores a cien dólares, dotados de un navegador que permitiría a esos niños acceder no a 49 sino miles de libros en línea. No sólo a los libros, desde luego, pero también a los libros.

Para volver a la lista de los 49 libros escogidos por los trece jurados, cualquier resultado se explica por su procedimiento, pero en este caso lo que cuenta es el resultado. Hay unos cuantos aciertos en la lista. La isla del tesoro, de Stenvenson, es el mejor de los mejores. Pero cada uno de nosotros tiene su corazoncito de lector, y le importan los libros que faltan, mucho más que le importan los que sobran. Falta el Quijote, desde luego. Qué manera de faltar. Faltan el Lazarillo de Tormes y las Mil y una noches (la verdad no está en un solo sueño, sino en varios, dice la narradora). Faltan las Décimas, de  Violeta Parra, y Poemas y antipoemas, de Nicanor Parra. ¿Hay un poema mejor para proponer como lectura a un niño que Se canta al mar? En la lista de los 49 libros está Tintín (y Asterix, y Mampato). Enhorabuena. Pero, ¿cuál Tintín?  ¿Tintín en América, un bodrio, o Las joyas de la Castafiore, una joya? También debería estar Borges, desde luego, así se trate de libros para niños. Y, a todo esto, ¿qué leía Borges cuando niño? Lo cuenta él mismo, en El otro: El Quijote, las Mil y una noches y, escondido detrás de los demás, un libro en rústica sobre las costumbres sexuales de los pueblos balcánicos.

Libros y amigos, pocos y buenos. Depende de cuáles, una vez más. Hay uno que no debería faltar en el Maletín, Como una novela, de Daniel Pennac, una invitación, llena de humor y de sentido común, a leer cómo nos dé la gana. El verbo leer no soporta el imperativo comienza diciendo Pennac, y pasa a enumerar los derechos del lector, independientemente de su edad: El lector tiene derecho a no leer. Tiene derecho a saltarse las páginas latosas. Derecho a no terminar el libro. El lector tiene derecho a releer una y otra vez y a leer lo que se le antoje. Y en cualquier parte. El baño siempre ha sido y seguirá siendo una estupenda sala de lectura.

Larga vida al Maletín literario. Los niños se encargarán de leer los libros buenos y de dar buen uso a los libros malos.

logocl 4 de octubre de 2007 PDF

2 octobre 2007

Aleluyas para los más chiquitos

[Ni El Quijote, ni Las Mil y una noches, ni Poemas y antipoemas]

Maletin

Un Maletín literario para fomentar la lectura entre las familias chilenas con menos recursos

Las 49 obras incluidas serán distribuidas el año que viene entre 133 mil familias sin recursos

Un jurado compuesto por trece personas ha seleccionado 49 obras literarias para repartir en Chile entre la familias de escasos recursos, durante un periodo entre el 2008 y 2010.

El Maletín literario, como se conoce a la iniciativa, estará compuesto por autores extranjeros y chilenos. Destacan las dos obras de Pablo Neruda que han sido incluidas en el listado:
Todo el amor y El libro de las preguntas.

La lista incluye obras en español como
Cien años de soledad de Gabriel García Márquez, La Casa de los espíritus, de Isabel Allende y la Antología de poesía y prosa de Gabriela Mistral. La lista no incluye a ningún autor español.

Entre los autores extranjeros, los beneficiarios del Maletin Literario podrán leer
El Principito de Antoine de Saint Exupery, La Metamorfosis y otros cuentos de Kafka, o comics de Tintín y otro de Asterix.

El Maletín, que también incluirá un diccionario enciclopédico, fue una propuesta lanzada por la presidente Bachelet el pasado 21 de mayo, con motivo de la inauguración de las sesiones ordinarias del Congreso. Las obras comenzarán a distribuirse en 2008 entre las 133 mil familias.

Extractado de El País.

Las obras del Maletín literario

1. Diccionario enciclopédico
2.
Horacio Quiroga Cuentos de la selva
3.
Edmundo D'Amicis Corazón
4.
Hans Christian Andersen Cuentos clásicos para niños
5.
Andersen, Grimm y Perrault Cuentos clásicos
6.
Angélica Edwards Cuentos de Grimm y Perrault
7.
Hermanos Grimm Antología de cuentos
8.
Hans Christian Andersen Antología de cuentos
9.
Oscar Wilde El príncipe feliz y otros cuentos
10.
Oscar Wilde El ruiseñor y la rosa y otros cuentos
11.
Violeta Diéguez Jugando con las palabras
12. G
abriel García Márquez Cien años de soledad
13.
Jack London El llamado de la selva
14.
Osvaldo Torres Cóndor Mallku
15.
Adap. José Quidel Un niño llamado Pascual Coña
16.
Francisco Coloane Cabo de hornos
17.
Francisco Coloane Antología de cuentos
18.
Manuel Rojas El delincuente y el vaso de leche
19.
Manuel Rojas Hijo de ladrón
20.
Isabel Allende La casa de los espíritus
21.
Robert Louis Stevenson La isla del tesoro
22.
Antoine de Saint Exupery El principito
23.
Floridor Pérez Mitos y leyendas de Chile
24.
Daniel Defoe Robinson Crusoe
25.
Gabriela Mistral Antología de poesía
26.
Pablo Neruda Todo el amor
27.
Pablo Neruda El libro de las preguntas
28. M
arta Brunet Aleluyas para los más chiquitos
29.
Esopo Fábulas
30. G
raciela Beatriz Cabal Tomasito
31.
Mariana Bravo Walker La cocina popular chilena
32. Themo
Lobos Ogú y Mampato
33.
Goscinny Asterix
34.
Hergé Tintín
35.
Dinie Akkerman y Paul Von Loon Para atrapar la luna
36.
Tim Burton La melancólica muerte de Chico Ostra
37.
Tim Burton Los dinosaurios
38.
Cecilia Beuchat Atrapalecturas 1
39.
Cecilia Beuchat Adivitrabalenguas
40.
Cecilia Beuchat Libro de Tobías
41.
Hernán Rivera Letelier La reina Isabel cantaba rancheras
42. V
iktor Frankl El hombre en busca del sentido
43.
Franz Kafka La metamorfosis y otros cuentos
44.
Ernest Hemingway Cuentos
45.
JD Salinger El guardián entre el centeno
46.
María de la Luz Uribe Cuentecillos con mote
47.
Oscar Castro Cuentos
48.
Ana María Pavez y Constanza Recart Kiwala y la luna
49.
Marcela Paz Papelucho detective.

27 septembre 2007

El meteorito contra la Pachamama

Dos aterrizajes forzosos sobre la Pachamama peruana, Fujimori y el meteorito

Meteorito

El sábado 15 de septiembre un meteorito entró en la atmósfera peruana provocando una intensa luz y abriendo un cráter de treinta metros a dos pasos del lago Titicaca. En las horas que siguieron al fenómeno, a cientos de campesinos de la región se le desataron vómitos, diarrea e incluso tartamudez, todo lo cual los científicos regionales atribuyen a los gases fétidos que emanan del hoyo abierto por el meteorito y a las esquirlas de plomo y plata disparadas por el cuerpo celeste al estrellarse contra la Pachamama.

Las escasas fotos que documentan el evento muestran un agujero a medias lleno por el agua de las lluvias que castigan la región. Ni luces ni sombras del meteorito. Bien puede ser que éste se haya desintegrado o que haya rebotado y esté de vuelta en los espacios siderales. También puede ser que se trate de la caída de detritus de algún programa espacial, chino de preferencia, como apuntan los rumores que recorren la Red y el Altiplano.

Hay quien diga que, de haberse abatido sobre Lima, el meteorito hubiese hecho gran ruido. Paradójicamente, de caer en Lima, o en alguna otra saturada megapolis, el fenómeno hubiese pasado probablemente desapercibido. Las barriadas están llenas de hoyos inexplicables y a la gente que se siente mal, en las urgencias de los hospitales la mandan a comprar aspirinas. Y ya es curioso que los meteoritos suelan caer en despoblados, en la taiga siberiana o en el puna altiplánica. Es como si evitasen la presencia humana, como si fuesen agorafóbicos, enfermos de tímidos. Como quiera que sea, el meteorito ha dirigido las miradas hacia Perú, que ha recibido dos aterrizajes forzosos en una semana, el meteorito y Alberto Fujimori, acusado de corrupción y de varios crímenes, extraditado por la justicia chilena.

Cuando Fujimori, un desconocido agrónomo, se subió a un tractor y comenzó a recorrer el Perú haciendo campaña para la elección presidencial de 1990, gobernaba Alan García. Tal como hoy. Eran tiempos de hiperinflación y de terrorismo. No había entonces dos diarios limeños que se pusieran de acuerdo sobre la noticia que merecía estar en la portada. Tan mal signo es que los diarios titulen todos lo mismo como que titulen todos diferente. La cacofonía de la prensa suena tan mal como los himnos militares en las radios. Casi treinta años más tarde, la prensa peruana titula hoy de manera unánime con el extraditado Fujimori, los diarios serios o semi-serios para documentar los hechos, la prensa “chicha” para presentar al chinito como víctima.

Alberto Fujimori derrotó en esa elección presidencial a Mario Vargas Llosa. El chinito trae buena suerte, decía entonces la gente. Una vez elegido, Fujimori no tardó en instaurar una dictadura, apoyándose en los manejos mafiosos del siniestro Vladimiro Montesinos, hasta que esas artimañas fueron tan lejos que hicieron que Fujimori fuese perdiendo sus comprados apoyos y se viese obligado a huir de su país y a renunciar a su cargo por fax. Lo inquietante del caso es que en 1990 Fujimori fue elegido con el tácito apoyo de los partidarios de García, tal como hoy García gobierna con el apoyo tácito de los partidarios de Fujimori.

Años más tarde, Vargas Llosa se cobraría revancha en su última novela, Travesuras de la niña mala, dando vida a un japonés de nombre Fukuda, un personaje pestífero, un perverso nasal, pedófilo en el sentido alternativo del término, como escribió en este diario Artemio Echegoyen. La caprichosa actualidad ha querido que el nuevo primer ministro japonés, en funciones desde ayer, lleve también ese nombre, bastante común en Japón. En otra novela célebre, Conversación en la catedral, tal vez la mejor de cuantas ha escrito, Vargas Llosa pone en boca de su protagonista, Zavalita, esta pregunta terrible, que se entierra o rebota como un meteorito: ¿Cuándo se jodió el Perú?

logocl 27 de septiembre de 2007 PDF

23 septembre 2007

Diario del monte de los olivos

Escrito e ilustrado en Sicilia en septiembre de 2007
Para la Tita


foto_Antonio_de_la_Fuente

 

Las piedras son mudas y los guías elocuentes

Según Empédocles de Agrigento, los antiguos sicilianos construían como si fueran inmortales y comían como si fueran a morir al día siguiente. 25 siglos más tarde, los sicilianos siguen comiendo de la misma manera. Ahora también construyen como si fueran a morir al día siguiente.

Agrigento, el valle de los templos griegos. Columnas dóricas, concepción europea, mano de obra cartaginesa. 25 siglos más tarde seguimos donde mismo.

Para proteger a los jóvenes de los sueños del alba, los griegos sacrificaban animales en el altar de Zeus. Parece tiempo perdido, 25 siglos después.

¿Por qué los dioses permiten a los hombres prosperar, crecer y multiplicarse? Porque los hombres les ofrecen las mejores piedras, las sobrevivientes, las que fueron griegas y romanas, y luego fueron árabes y después normandas. 25 siglos más tarde, las piedras todavía dan de comer a los guías turísticos.

Sicilia_septiembre_2007_266

Un juego de video

Para llegar a Monreale, hay que atravesar el calvario, el purgatorio y el limbo, esto es un barrio palermitano, oír bocinas, oler bencina, sortear motos,  ambulancias, peatones, carros de bomberos. Atravesar un barrio palermitano es como probar suerte en un juego de video, pero con adrenalina de verdad. En Monreale, las historias que cuentan los mosaicos de la catedral y los capiteles de las 228 columnas del claustro valen la travesía del calvario y la del purgatorio y la de Palermo. Y son mucho más divertidas que un juego de video.

Avispas al almuerzo

Quien dijo que los dinosaurios desaparecieron no se ha dado de cara con un lagarto siciliano. Los dinosaurios no han desaparecido. Sólo que con el cambio climático han ido encogiendo.

Es de noche y despierta el ladrido de los perros. Una pareja de jabalíes pretende comerse su comida. Los jabalíes dan un paso adelante y los perros dan dos pasos atrás. Ladrando, para que no se note.

Se dice que el pez grande se come al pequeño, pero los peces sicilianos son vegetarianos y no se apartan del bañista, más bien lo siguen como si éste fuese un pez y supiese del lugar donde está el tesoro.

Primer trabajo del domingo, salvar bichos de la piscina. Prioridad a las abejas. Segundo trabajo del domingo, espantar a las avispas del almuerzo.

El bosque para el que lo queme

Ciclámenes en el sotobosque. Malas yerbas que huelen bien. Maná, miel de la resina del fresno. El ágave florece a los 25 años y muere. El olivo es milenario y sigue ovulando. Al fuego con ellos. Que termine cuanto antes tanto pastoreo. Que el mundo se hominice cuanto antes. El bosque para el que lo queme.

foto_Antonio_de_la_Fuente_2

El día del Señor

Procesión de San Gandolfo. Estricta jerarquía siciliana. Delante del santo, el monaguillo y el cura. Detrás, el propietario con su cuidada estola, luego el funcionario y, cerrando el cortejo, el campesino, el pueblo llano. Pobres y ricos se muestran en su mejor tenida y se consideran unos a otros, de arriba abajo, sin escatimar miradas. Domingo de fiesta en un pueblo de montaña.

 

 

En siciliano, playa se dice plaia

Cuerpos por el suelo. Un cuerpo sólo se humaniza cuando se levanta, se sacude la arena y junta sus efectos personales.

La novedad del verano, de lo queda de verano, la ponen las masajistas chinas. Massaggio, massaggio, proponen, con su dicción nasal. Cinco euros la aceitada. Las masajistas son muchas. O será un efecto óptico, de tan parecidas que son. El jefe de la cuadrilla las dirige a través de un celular.

Otra profesión que no da abasto es la de tatuador, o como se llame. Casi no hay quien no tenga un asunto tatuado en el pellejo. Estos artistas visuales tendrán un catálogo de huarifaifas para proponer a su distinguida clientela. Y los unos se inspirarán de los otros. La joven lleva un tatuaje en un pecho, la vieja quiere dos en cada uno.

Piedras en la playa. El niño junta las pulidas, las jaspeadas, las lustrosas, las bruñidas, las brillantes y luego las devuelve a la mar. Ya sabe que lejos de la mar son mudas.

foto_Antonio_de_la_Fuente_3

Las siete diferencias

1 Los europeos vienen a Sicilia de vacaciones. Los sicilianos van a Bélgica a trabajar. Sanduichero en Brujas, veraneante en Sicilia.

2 En Sicilia, cuando se pone el sol, aparece la luna, los planetas, las constelaciones. Las últimas en aparecer son las estrellas fugaces y también son las primeras en irse.

3 Las nubes son más vistosas desde arriba. Desde arriba del avión, quiero decir, desde arriba del Etna, desde arriba del monte de los olivos.

4 Viejos en las calles de los pueblos. Y algunos niños, menos. Pero viejos y niños están en el centro del escenario. En la Europa del norte, los niños y los viejos están detrás de las bambalinas.

5 De lejos parecen cuervos pero de cerca se conoce que son curas.

6 Sicilia no es el tercer mundo. Es Europa, con un tercio de tercer mundo en cada tercio. Vomitonas de basura a orillas del camino. Bosque quemado. Vomitonas de basura entre los peces de la mar.

7 La séptima diferencia es por el estilo.

 

Wilkommen in België

El avión se dispone a aterrizar. Hace frío en Zaventem. Los turistas le añadimos la parte inferior al pantalón. La señora siciliana, de regreso después de pasar el verano en la isla, pasa la mano por la gelsemina que trae desde su pueblo para plantarla en Bélgica. Y el jazmín le devuelve el cariño con una vaharada de su olor.

20 septembre 2007

Chamuscada Sicilia

En Sicilia la mafia ha prendido y se ha enraizado como en ningún otro sitio, chamuscándola como los incendios de los veranos.

Trinacria

Sicilia es una isla exportadora. De fruta, de vino, de aceite. Es un placer tomar unas naranjas sicilianas, un buen vino o su delicioso aceite en la isla misma o en cualquier lugar del mundo. Sin embargo, lo que mejor y más lejos ha exportado la isla, lo que más ha calado en los mercados mundiales es un concepto correoso, el de la mafia.

Es injusto con los sicilianos que se les asocie automáticamente con la Cosa Nostra y sus prácticas. Porque mafias hay en casi todas partes. Basta echar un vistazo al diario para ver que la llamada actualidad suele ser obra de organizaciones mafiosas o bien su marca no anda lejos. Y lo inquietante es que la de los diarios es la actualidad visible o descubierta y lo propio de las mafias es operar en la sombra.

Lo cierto es que es en Sicilia donde la mafia ha prendido y se ha enraizado como en ningún otro sitio, chamuscando la isla como lo hacen los incendios de los veranos. No es casualidad si el pueblo de Corleone se encuentra a unos cuantos kilómetros de Palermo, la  capital siciliana, y tenga el nombre del célebre padrino de la novela de Mario Puzo, llevada al cine por Francis Ford Coppola.

Por las calles de Palermo desfiló este sábado 8 de septiembre un millar de personas en apoyo al periodista palermitano Lirio Abbate, amenazado de muerte por la mafia local por denunciar, en su libro Los cómplices, a los hombres de ésta en el Parlamento, así como la extorsión que la mafia ejerce sobre los comerciantes locales y, también, la anuencia de éstos para plegarse a estas exigencias.

El sondeo semanal de La Repubblica indica que el sentimiento de miedo aumenta no sólo en Sicilia sino en el conjunto del territorio italiano. Un hecho seguro es que nos sentimos inseguros, escribe el diario romano. La ola migratoria ha traido buen número de pobres hasta las costas italianas y en las ciudades la figura que la representa es la del lavavetri, el limpiavidrios que se acerca a los automovilistas en las esquinas armado de un trapo y de una escobilla. Una incongruencia más, junto a los millones de autos y de motos que han tomado por asalto unas ciudades  creadas para circular a pie o a caballo. Como de costumbre, el miedo se proyecta en las víctimas de las mafias más que en las mafias mismas, que son quienes organizan el tráfico de seres humanos, las que reescriben los balances, las que compran el silencio informativo.

Sicilia, desde donde escribo estas líneas, se ve tranquila y no particularmente amenazadora, chamuscada eso sí, como está dicho, por los numerosos incendios del verano. Pero es bien sabido que las aguas mansas esconden culebrones. Tal vez sea Leonardo Sciascia, el novelista siciliano que mejor ha descrito la mafia y sus prácticas, quien exprese el sentimiento indecible que asalta al extranjero frente a la belleza de ésta, la mayor isla del Mediterráneo, donde una piedra es griega, la otra romana, la tercera árabe y la cuarta normanda: Sicilia tiene tres puntas y siete caras. Ver las casas y descubrirlas habitadas es una sorpresa. En ellas, la gente se mueve como en un mundo que está más allá de las palabras, como en una sobreviviente y sin embargo atrofiada humanidad. Aquí nuestras voces suenan dispersas, irreales.

logocl 20 de septiembre de 2007 PDF

13 septembre 2007

Nicanor Parra contra la ley de la perspectiva

Nicanor Parra no respeta la ley de la perspectiva y se agranda a medida que se aleja.

Parra

A la lista de definiciones de antipoesìa que propone el propio Nicanor Parra (un temporal en una taza de té; una capilla ardiente sin difunto) cabrìa tal vez agregar otras dos: la antipoesìa es una manera de leer el diario y un método para redactar titulares de prensa. Espero que un estudio que subraye la familiaridad de la antipoesìa con el periodismo ya estè escrito y contenga al menos estas dos ideas: Parra escribe antipoesìa con materiales similares a aquéllos con los que se hace un periòdico. Y, también, el lector ideal para la antipoesìa es aquél que acaba de leer el diario y lo bota al papelero. Para reciclarlo, desde luego.

Borges decìa que quien quiera enterarse de cuanto ocurre en el mundo pierde su tiempo leyendo el diario. Parra no lo contradirìa probablemente y, sin embargo, propone otro camino y con materiales de derribo tomados de la prensa formula un discurso alternativo. Octavio Paz, surrealista diplomàtico (lo que no es lo mismo que ser diplomàtico surrealista), aconsejaba por su parte a un aprendiz de poeta: En los ratos libres pasta sin cesar: hay inmensos predios de periòdicos.

Lo cierto es que Parra ha escrito magnìficos poemas directamente sacados de los diarios, como los espléndidos Mil novecientos treinta y Noticiero 1957, compuestos ambos con los endecasìlabos (Plaga de motonetas en Santiago) con los que los periodistas encabezan las noticias. La experiencia del Quebrantahuesos, en la que se embarcaron Parra y Jodorowsky en su ya remota juventud consistìa precisamente en cortar y pegar titulares de diarios para romperle los huesos al lenguaje periodìstico e intervenir por esa vìa en las conversaciones entre parroquianos quienes, como es bien sabido, suelen intercambiar frases directamente tomadas de la prensa.

El formato màs reciente de la antipoesìa, el del discurso de sobremesa, es también marcadamente periodìstico, tanto por sus temas, cuanto por la manera, que es la de un comentarista de una actualidad tan cambiante como repetitiva. Parra resume la actualidad o la adelanta. Un poema como La batalla campal, escrito en 1969, que relata el enfrentamiento entre energùmenos y robots frente a La Moneda, prefigura el  11 de septiembre de 1973. Treinta y cuatro annos màs tarde la Encuesta Casen confirma que la desigualdad entre chilenos es creciente. Este es, entonces, el consejo de Parra a Su Excelencia: Nadie debe ganar màs que SE el Presidente de la Repùblica. Ni menos, dijo el otro.

Incluso el artefacto aquel que afirmaba que la izquierda y la derecha unidas jamàs seràn vencidas aparece tres dècadas màs tarde como algo màs que una mera boutade, cuando la la derecha prueba a aduennarse de los valores de la izquierda y èsta se muestra a menudo profundamente reaccionaria. En Italia por estos dìas da mucho que hablar, como todo en Italia, aun antes de ser publicado un libro de parreano tìtulo: El liberalismo es de izquierda. Parra lo dirà a su manera, ni capitalista ni socialista, sino todo lo contrario: ecologista intransigente. Quien lea los Discursos de sobremesa verà que Parra repite y se repite, como hacen los pedagogos y los periodistas, poniendo en boca de unos y de otros sus propios conceptos. Incluso prodiga consejos que el gremio periodìstico desoye: Escriban lo menos posible y solamente en el idioma patrio.

Este septiembre, Nicanor Parra cumple 93 annos. Desde luego, como dice él mismo hablando de los demàs, Parra no respeta la ley de la perspectiva y se agranda a medida que se aleja.

 logocl 13 de septiembre de 2007 PDF

PS: Escribo en un teclado italiano. Disculpas por los acentos y la ausencia de la vieja y querida letra enne.

6 septembre 2007

Animales a diario

En Flandes, en el norte de Bélgica, ya hay más cerdos que humanos.

Laika

Dice la novelista australiana Elizabeth Costello, alter ego del premio Nobel sudafricano J. M. Coetzee, que en la defensa de los derechos de los animales es sospechoso el abuso de gorilas pensativos, de jaguares sexy y de pandas a los que dan ganas de apretar. Deberían ser pollos y chanchos, ratas blancas y langostinos, los que salieran en la portada de los diarios. No recuerdo a cuándo remonta la última vez que vi a un animal en la portada de un diario. Me refiero a un animal-animal, cubierto de plumas o de pelos, y no a un miembro de la fauna emplumada y depilada que encandila a los telespectadores. Tal vez se trate de la perra Leika, a quienes los soviéticos pusieron en órbita en 1957 y condenaron a morir por asfixia tras consumir, en diez días que le parecerían eternos, el oxígeno que contenía aquel ataúd espacial.

No en portada, pero sí en las páginas interiores pueden leerse numerosas noticias protagonizadas por animales. En Australia, la multiplicación de gatos salvajes, una amenaza para la fauna local, da pie a una campaña para reducir el número de garduños, en la que se recomienda incluso pasarlos por la cacerola. El wild cat stew (estofado de gato salvaje) sabría a pollo o conejo, según los gastrónomos. Un consumado carnívoro puede estar dispuesto a comerse a otro carnívoro, aun cuando los científicos adviertan del riesgo de contraer bacterias y toxinas. A un vegetariano, en cambio, la idea de comerse a un carnívoro le pondrá los pelos de punta. Para responder a la consabida pregunta sobre el porqué se convirtió en vegetariana, Elizabeth Costello echa mano a Plutarco: Por mi parte, me sorprende que usted pueda llevarse a la boca el cadáver de un animal muerto, que no encuentre insoportable masticar esa carne marchita y tragar el jugo de esas heridas mortales.

En otro registro, los diarios abundan en historias animales que tienen todo de las fábulas. Como este love story entre elefantes en la India, en el que un elefante silvestre libera a trompadas a una elefanta domesticada de las cadenas que la atan a un circo y se van juntos por la carretera de la selva. Toda historia feliz carga con su dosis de melancolía y en ésta la nota triste la pone la segunda elefanta del circo, que se deja morir de pena por la ausencia de su amiga y de depresión por no haber sido ella la elegida. Y el dueño del circo, que queda al borde la quiebra.

Un congreso de expertos advierte, en Suiza, sobre la desaparición de muchas razas de animales de granja, a causa del éxito de las razas más productivas. La amenaza se cierne particularmente sobre África, donde las vacas holandesas comienzan ya a remplazar en el paisaje a los cebúes provistos de bellos cuernos, pero menos carnosos y lecheros. Lo mismo con los pollos broiler y los rozagantes chanchos europeos. Por cierto, Europa está llena de cerdos y hay regiones, como Flandes, en el norte de Bélgica, donde hay más cerdos que humanos. Y sin embargo, pese a la sobrepoblación humana y porcina, no se siente en Flandes estrechez. Salvo en las autopistas. Contrariamente a África, continente poco poblado, en cuyas ciudades parece asomar la gente a borbotones. En el sur de Europa, corre peligro el burro, que apenas se utiliza como fuerza de trabajo. Y ya se sabe quiénes han venido a remplazarlo.

El reino animal está siendo domesticado y europeizado a grandes trancos, al punto que hoy en Europa se producen más animales brasileros que en el propio Brasil. Como contrapartida, en los sitios de video en Internet los últimos retazos de vida salvaje tienen mucho éxito de audiencia, gracias a las filmaciones de los turistas en las reservas africanas. Así puede verse a un grupo de búfalos rescatar a uno de sus cachorros de las garras de una manada de leonas y de las fauces de un cocodrilo, en una bella demostración de unidad y de estrategia.

La noticia del día la da el Reino Unido, permitiendo los embriones híbridos entre hombre y animal. Para los antiguos griegos, en el mundo había seres de tres órdenes, dioses, hombres y animales. De entonces ahora, el predominio humano se hecho incontestable y dioses y animales han ido desapareciendo. De la portada de los diarios, quiero decir.

logocl6 de septiembre de 2007 PDF

PS: En septiembre se llenan las escuelas, las fábricas, los trenes, las autopistas. Llega el momento de irse de vacaciones. Por si no consigo colgar aquí los Caminos de los dos jueves venideros (el próximo celebra a Parra y el siguiente tendrá un airecillo mafioso), los pueden encontrar en las páginas de opinión del diario. Gracias por la compañía a la distancia.

2 septembre 2007

Lámina animal

Concurso de pesca. Los pescadores arrojan bolas de sebo a las carpas, que muerden el anzuelo y pasan la tarde en una red bajo el agua, hasta que las dejan alejarse aleteando. Pasa una formación de patos. Una gallina de agua los sigue a distancia. Tal vez los imite. Una oca ocre se apoya en una pata. Por este lugar pasan las estaciones. Es el otoño y la avutarda, la oca ocre, se apoya en una sola pata.

Lac

También hay quien va al circo o duerme la siesta. Los domingos por la tarde son lentos y previsibles como las estaciones. Por eso dejan huella.

Plonk

(La imagen es de Plonck & Replonck)

30 août 2007

Crematorios del Peloponeso

Los incendios tienen de todo, menos de naturales. Con el fuego hacen su agosto cultivadores, madereros y pirómanos.

20070827

El tiempo, asunto eterno. O provisoriamente eterno. No el tiempo, el implacable, el que pasó, no el tiempo que pasa, sino el tiempo que hace. El sol y la lluvia, y la nieve de este invierno. Que nieve en Santiago, pase. Que nieve en Buenos Aires, eso ya es noticia en la sección internacional. A ver cuándo nieva en Rio de Janeiro.

Noticia por estos días es el fuego de los incendios. Que los incendios en Grecia se lleven por delante más de sesenta vidas humanas y conviertan las aldeas del Peloponeso en crematorios abiertos es una tragedia. Que sean los pirómanos los que metan fuego es para mesarse los cabellos. Los pirómanos podrían buscarse una locura más razonable. El verano pasado el calor, el viento y los pirómanos se cebaron con Galicia, en una punta de Europa, y éste lo hacen con Grecia, al otro extremo.

En cambio, que este verano sea el más lluvioso en cien años en Inglaterra no deja de ser normal. Según Julian Barnes, los ingleses no entienden qué puede tener de particular el diluvio bíblico, con sus cuarenta días y cuarenta noches de lluvia intensa. Eso es un verano normal en las islas británicas.

La culpa de tanto desbarajuste la tiene el Anticiclón de las Azores, unas altas presiones temperamentales que, cuando se instalan en América del Norte y en el Caribe se llaman Anticiclón de Bermudas, y cuando se estiran hacia la vieja Europa se llaman Anticiclón de las Azores. Es éste el que lleva o trae sol o lluvia según donde se instale. Este verano ha traído algo de sombra a Portugal y a España, lluvia persistente a Inglaterra e incendios a Sicilia, a Canarias, a Croacia, a Albania, a Bulgaria, a Turquía, y ahora a Grecia.

Ahora mismo, más de diez mil incendios abrasan Brasil, lo que es abrasar doble, porque Brasil quiere decir pau brasil, árbol de brasa, árbol que arde, especie que abundaba en sus costas cuando los portugueses llegaron a cortarlo a destajo. Arde la Mata Atlántica, que era tupida hasta hace pocos décadas y de la que subsiste hoy apenas un íngrimo seis por ciento. Por cierto, estos incendios tienen de todo, menos de naturales. Con el fuego hacen su agosto pirómanos, cultivadores y madereros. Al borde del Mediterráneo, los incendios abren la puerta a la especulación inmobiliaria. En la espesura brasilera, todas las oportunidades son buenas para acabar con la selva y meter ganado y plantar soja.

En Australia no llueve casi desde hace cinco años. Los arroyos se han secado y los ríos llevan un diez por ciento del cauce habitual. Según los expertos, regiones enteras de la isla-continente están bajo la amenaza de una caída en picada de la producción agrícola, con la consiguiente alza de los precios en el mercado mundial de los productos alimentarios de base, subida que se ve reforzada por la fiebre de los biocarburantes que arrastra a medio planeta. El gobierno australiano responde a la sequía de particular manera e insiste en su rechazo a firmar el protocolo de Kyoto.

Por mi parte, escribo desde un lugar rodeado de bosques, abrigado de los incendios por la lluvia perseverante. Por la mañana asoman un par de ardillas, animales listos y rápidos que desconocen el vértigo, ese sentimiento humano. Y que desconocen el fuego de los incendios, esa manía de pirómanos. También, si hay suerte, puede oírse el golpeteo en la madera de algún pájaro carpintero. Es la lluvia la que hace al bosque, y con él a la ardilla y al carpintero. La lluvia que llueve sobre mojado. La lluvia que lo apunta a uno y lo deja mojado como pitío. La lluvia persistente, la que atenta contra la autoestima.

Lejos de aquí, en Cabo Verde y a lo largo de todo el Sahel, el borde que separa el Sahara del corazón del Africa verde, debería por estos días comenzar a llover, abierta la corta estación de las lluvias. Pero no llueve. De hacerlo, los campesinos podrían celebrar una fiesta. Pero no da el tiempo, apenas caen las primeras gotas deben ponerse a trabajar para que la poca agua que caiga se aproveche y no se pierda.

logocl 30 de agosto de 2007 PDF

PS: Titular de algún diario sobre los incendios en Grecia: 'La llama olímpica'. El pitío es uno de los varios carpinteros que vuelan en Chile, llueva o no llueva. Curioso, hoy no llueve. (Hoy es jueves, esto es Bélgica).

26 août 2007

Borges and me (breve relación)

Servant

Dejé, hace unas semanas, este comentario en el blog de Clonclón a propósito de Borges. Se trata de una apretada síntesis de mi brevísima relación interpersonal con Borges:

Como voy sabiendo de su apego a Borges, puedo contarle que nos dimos una vez de cara con él. Salía del cine, del brazo de Kodama, una noche de verano en Buenos Aires, en marzo de 1983. ¿Qué puede ver un ciego en una sala oscura? El Sirviente, de Pinter, filmado por Losey, cuyos diálogos apreciaría. Lo saludamos y le pedimos una entrevista, por pura deformación profesional. Nos dijo que llamáramos al día siguiente muy temprano y nos dio su teléfono, que tuvimos que memorizar. El diálogo duraría unos cuantos minutos apenas, lo suficiente para que en torno nuestro se juntara un buen número de curiosos. Al día siguiente bajé a la recepción del hotel para telefonear. Borges se puso en seguida, pero antes de que alcanzase yo a formular un saludo, cortó. No quise insistir. En julio de 1986, dos meses después de su muerte, estuvimos en Plainpalais, el cementerio donde descansa en Ginebra, rodeado por las tumbas de los notables de la ciudad. Nos costó encontrar su sepultura, a pesar de que sería la más reciente entonces. Alguien había birlado la placa con su nombre.

Clonclón
    ¡Y lo cuenta así, como si tal cosa! Acaba de convertirse usted en el nick más envidiado por mí de todo el blog.

Hernández
    Yo aún diría más: Josepepe es el personaje más envidiado de toda la blogosfera.

Anónimo
    Pero si le colgó el teléfono...

Clonclón

    ¿Y qué? Yo daría lo que fuera por que Borges me hubiera colgado el teléfono.

El ocurrente
    Joder, qué ciego.

PS: Hernández parece ser un tipo macanudo.

23 août 2007

Terremoteados

No es fácil vivir sin agua ni luz y con poca comida. Y con los rateros a la vuelta de la esquina. Todo lo cual nos recuerda nuestra propia experiencia de damnificados telúricos, de tristes terremoteados.

Terremoto2

Como en todo terremoto que se precie, en el de Pisco una semana más tarde las réplicas aún no cesan. El epicentro, por su parte, se ha ido desplazando lentamente hacia otras localidades aledañas para terminar por situarse, en los diarios y en las televisiones, muy lejos del Perú, allí donde se mueve ahora la trémula actualidad. Hablamos del epicentro informativo, desde luego. En Pisco mismo, sobre el terreno, un voluntario español se quejaba unos días atrás de que no lo dejaban trabajar. Se había traído al perro socorrista, decía, y había pagado los dos pasajes, pero la inseguridad le impedía trabajar. Un paso más y pedía que prohibieran los terremotos lejos del primer mundo.

La ayuda tarda en llegar y en ser repartida. Y trae sorpresas. Unas latas de atún vienen decoradas con la cara de dos peces gordos, Chávez y Ollanta Humala, y esta leyenda: « Ante los saqueos, desesperación y caos, solidaridad con nuestros compatriotas ». ¿Quién es el oportunista donador? ¿El partido de Humala, el gobierno venezolano, la CIA?

Las primeras noches, tras una catástrofe como la de Pisco, se hace difícil dormir sabiendo que hay gente atrapada bajo los escombros. Y se hará aún más difícil dormir sintiendo las réplicas, sin saber si el sacudón siguiente será más fuerte que todos los anteriores. Tampoco es fácil vivir sin agua ni luz y con poca comida. Y con los rateros a la vuelta de la esquina. Todo lo cual nos recuerda nuestra propia experiencia de damnificados telúricos, de tristes terremoteados.

A cada cual sus grietas en el suelo y en el cielo raso. A cada generación su terremoto. La de nuestros padres se asomó al mundo con el terremoto de Chillán y se hizo adulta, de temblor en terremoto, con el maremoto de 1960. Tras éste y hasta 1985, conocimos una seguidilla de terremotos coincidente con el tembloroso estado en que se sumió la sociedad chilena por entonces y con la posterior lluvia de ceniza que representó la dictadura. Se calcula en torno a 50 mil la cifra de víctimas por terremotos en toda la historia nacional. Pero ésta es una cifra aproximativa, echada con la olla, y está muy lejos de la precisión de medida de un sismógrafo.

La serie de terremotos, explosiones volcánicas y el maremoto que afectó al sur de Chile en mayo de 1960 constituye la mayor sacudida registrada por la ciencia telúrica, habiendo alcanzado los 9.6 grados en la escala de Richter. Quien haya probado el agua salada del lago Budi o visto cómo las calles de Toltén viejo desaparecen en el océano convendrá en que se trató de un verdadero cataclismo. Murieron entonces tres mil personas, seis veces más que en el reciente terremoto pisqueño. El sur de Chile era, hace cincuenta años, mucho menos poblado de lo que es hoy la costa sur de Lima, a pesar de que aquél es un vergel y ésta un desierto.

Después de cada terremoto, la terapia colectiva consiste en contar con detalles lo que cada cual hacía en los momentos previos a la sacudida y cómo se puso a salvo. Luego la sesión continúa con el terremoto precedente y así sucesivamente hasta el año que corresponda según la edad de los comentaristas. Un protagonista de la notable película La frontera, de Ricardo Larraín, convencido de que al momento del maremoto en el mar se abre un hoyo oscuro que comunica con el centro del universo, se echa mar adentro cuando el océano se retira para lanzar su ola devastadora.

De manera casi simétrica, en pleno terremoto el cielo de Lima mostró un fogonazo de gran luminosidad. Para muchos se trató de un vulgar corte de circuito eléctrico. Pero hay quien dice que un fenómeno como ése se llama triboluminiscencia, que se trata de una liberación de iones producida por frotación durante un fuerte movimiento telúrico visible únicamente en una noche de invierno, como fue el caso la semana pasada en Perú. El fenómeno fue visto por mucha gente y hay incluso quien lo registró. La mayoría de la población, sin embargo, tenía los ojos puestos en otra parte. A esa hora la televisión limeña transmitía el programa « A vacilar ».

logocl 23 de agosto de 2007 PDF

Publicité
Publicité
Camino de Santiago
Publicité
Sobre el nombre de este blog
Derniers commentaires
Publicité